La Audiencia Nacional ha decidido abrir diligencias e investigar el atentado ocurrido hace 38 años en las oficinas que tenía General Motors en la calle del Capitán Portolés número 1 cuando se estaba instalando en Zaragoza. La fiscal Carmen Monfort se puso a trabajar en el caso hace unos meses tras reunirse con el hijo del vigilante de seguridad Jesús Argudo Cano, al que mataron de un disparo tres terroristas encapuchados el 2 de mayo de 1980. "Es un asunto tan extraño que algo tenemos que hacer", dijo la fiscal a la familia de la víctima, sin ocultar, eso sí, que después de casi cuatro décadas, el delito ha prescrito. De hecho, lo único que pretende es saber qué paso realmente para poder aliviar su dolor.
Leer mas en la fuente: heraldo.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.